Tabla de contenidos
- El estrés, agobio y agotamiento de los profesores no es absurdo
- La maldita excusa de las vacaciones y de los puentes
- Parte de la sociedad no tiene ni idea de lo que hace un profesor en su trabajo
El otro día hablaba con una amiga que es profesora de segundo de la ESO. Me contaba que estaba agotada y estresada. Pero no se sentía cansada de dar clase ni de estar con los estudiantes sino por toda la burocracia y exigencias del sistema.
Y es que se había pasado más tiempo corrigiendo exámenes, trabajos, deberes y rellanando informes que con los alumnos. Desgraciadamente, gran parte de la sociedad ven como una queja más el cansancio de los profesores.
El estrés, agobio y agotamiento de los profesores no es absurdo
Aunque haya mucha gente que piense que sí. Estoy cansada de escuchar que los profesores no hacen nada durante todo el curso. Ojo, no digo que no haya docentes que les de igual su trabajo.
Pero muchos luchan al máximo por una educación de calidad. Y es injusto que se les trate así. Los profesores de corazón siempre están al pie del cañón dando lo mejor de sí mismos incluso cuando todo está en su contra.
Para mí pesar, no es la primera vez que escucho que un profesor tiene que acudir a un profesional de la salud para poder superar el excesivo estrés de su trabajo.
Y no es la primera vez que escucho que muchos docentes se ven superados por la situación actual de la educación y el mal trato hacia ellos. Y aun así, hay gente que dice que “los profesores no tienen derecho a estar cansados”.
La maldita excusa de las vacaciones y de los puentes
Tengo muchos amigos educadores, maestros y profesores de corazón. Y todos ellos han invertido días de sus vacaciones y descanso para preparar clases, actividades, seguir planificando el curso, investigando la mejor forma de aplicar metodologías activas…
Así que sí, puede que no tengan que ir a los centros educativos pero no están de vacaciones al cien por cien casi nunca (excepto en verano. Pero como en otros trabajos, obviamente).
No sé por qué se le tiene tanto rencor a los profesores por sus vacaciones. “Es que tienen mucho días libres para lo poco que hacen”. Pero, ¿acaso sabe la gente lo que hace un profesor de corazón en sus clases? ¿Acaso sabe al esfuerzo psicológico al que están expuestos en muchas ocasiones? Me parece a mí que no. Por lo que veo, la empatía y comprensión al docente está a la orden del día en este país (nótese la ironía, por favor).
Parte de la sociedad no tiene ni idea de lo que hace un profesor en su trabajo
Sí, estoy de acuerdo en que hay profesores que no deberían estar en las aulas. Pero hoy estamos hablando de los que sí se lo merecen y son tratados de la peor forma posible.
Además, tengo la desagradable impresión de que la gente no sabe realmente cuál es el desempeño real de los docentes. Creo que tienen en la cabeza a un profesional que se dedica a transmitir conocimiento y corregir exámenes sin nada más que hacer.
Aunque todavía hay profesores así, muchos docentes se alejan totalmente de esa “filosofía”. Los que se dedican a la educación por vocación y con emoción no tienen nada que ver con el rol docente de antaño.
Ellos se implican con los estudiantes, con las familias y siempre están buscando las mejores formas de superarse en el trabajo. Intentan conectar con los alumnos, comprenderles y llevan a las aulas la educación que creen que se merecen.
Y todo esto, con el sistema educativo apretándoles el cuello. Rellenando un montón de informes y papeleo. Intentando cumplir las exigencias de los programas para no ser despedidos y quitándose horas de sueño para seguir trabajando en lo que más les apasiona: la educación.
¿Cómo es posible que a esta clase de profesores se les de la espalda y se les critique? La verdad es que no entiendo nada…