
Rendición de cuentas 2024: Barranquilla avanza como ciudad ambiental
Barranquilla sigue consolidando su transformación hacia una ciudad ambiental y sostenible, una de las principales apuestas del alcalde Alejandro Char dentro del Plan de Desarrollo 2024–2027. Durante la rendición de cuentas de la línea estratégica “Ciudad Ambiental y Sostenible”, realizada en la localidad Riomar, se presentaron los avances que posicionan al Distrito como un referente nacional en sostenibilidad urbana, arborización, eficiencia energética y recuperación de espacios públicos.
El objetivo de convertir a Barranquilla en una ciudad sostenible ha sido una constante de la actual administración, basada en un modelo de desarrollo que equilibra el crecimiento económico, la conservación del medioambiente y el bienestar social. Los resultados de 2024 demuestran un progreso sostenido hacia esa meta, con cifras concretas en arborización, energía renovable, manejo de residuos, educación ambiental y participación ciudadana.
Entre las dependencias que lideran este propósito se encuentran la Agencia Distrital de Infraestructura (ADI), Barranquilla Verde, la empresa K-yena, Triple A, la Oficina de Servicios Públicos y el programa Siembra Más, que este año rindieron cuentas ante más de 300 asistentes en la Institución Educativa Distrital Pies Descalzos de la localidad Riomar.
Barranquilla ha alcanzado un nuevo hito en su compromiso ambiental. A través del programa Siembra Más, la ciudad logró intervenir más de 60.000 metros cuadrados de áreas verdes durante 2024, alcanzando el 62% de la meta anual. Desde el inicio del programa en 2018, ya se han recuperado más de 743.000 metros cuadrados de espacios naturales, generando entornos más saludables y visualmente agradables para los ciudadanos.
En materia de arborización, la capital del Atlántico superó su meta anual con la siembra y trasplante de 2.242 árboles de gran tamaño, alcanzando el 102% del objetivo propuesto. En total, Barranquilla suma más de 133.600 árboles sembrados desde 2018, lo que refuerza su papel como una de las ciudades con mayor cobertura arbórea en el país. Este esfuerzo contribuye directamente a la regulación térmica, la biodiversidad urbana y la mitigación del cambio climático.
El programa Mi Barrio Siembra también destacó en 2024 al vincular 150 familias barranquilleras en procesos de agricultura urbana. De ellas, 120 permanecen activas con huertas caseras que han producido más de 50 kilos de alimentos frescos, fortaleciendo la seguridad alimentaria local y el sentido de comunidad.
A estos logros se suman los proyectos de cooperación internacional como GenerACTOR, cofinanciado por la Unión Europea, que promueve la recuperación de espacios verdes con participación ciudadana. Estas acciones consolidan la imagen de Barranquilla como una ciudad inclusiva, innovadora y comprometida con el medioambiente.
La autoridad ambiental Barranquilla Verde reportó un importante impacto en educación ambiental y conservación. Durante el año, más de 4.000 personas participaron en programas de formación, incluyendo 45 instituciones educativas y 25 empresas. Además, se formaron 1.096 ciudadanos en restauración ambiental, se valoraron más de 500 especies de fauna silvestre y se liberaron o reubicaron 397 animales. El Distrito también implementó 50 huertas urbanas, generando 4.200 plántulas de hortalizas y fortaleciendo la agricultura sostenible en comunidades y colegios.
En el manejo de residuos peligrosos (RESPEL), Barranquilla alcanzó 1.434 usuarios activos en sectores clave como salud y comercio, mientras que se realizaron 1.400 seguimientos y se capacitó a 120 personas. Además, se formuló el Plan Integral de Gestión de Cambio Climático, alineado con la Estrategia E2050, con 30 metas orientadas a la adaptación y mitigación del impacto ambiental.
La Agencia Distrital de Infraestructura (ADI) fortaleció la estrategia Todos al Parque, entregando 14 parques nuevos que suman más de 80.000 metros cuadrados de espacio público. También se consolidó la política de Parques Inclusivos, que garantiza el acceso de niños y niñas con discapacidad a juegos y espacios adaptados. Entre las obras más destacadas se encuentra el Parque Lineal Malecón de Rebolo, una intervención clave para el suroriente de la ciudad.
El mantenimiento de 334 espacios, la intervención de 17 kilómetros de canales y el retiro de 2.365 toneladas de residuos sólidos reflejan el trabajo sostenido en limpieza urbana y prevención de inundaciones, en línea con la estrategia Barranquilla Limpia y Linda.
La sostenibilidad también se refleja en el sistema de alumbrado público. Con 69.033 luminarias instaladas, 222 nuevas y 12 parques iluminados, la empresa K-yena S.A.S. logró una reducción del 9% en emisiones de CO₂ y un ahorro energético superior al 30%. Además, se instalaron paneles solares en 37 edificios públicos, generando un ahorro del 20% en consumo energético, y se inició la construcción del primer parque solar para alumbrado público del Distrito.
Por su parte, Triple A impulsó proyectos de gran impacto para un acueducto y alcantarillado sostenibles, además de iniciativas de transición energética. Entre ellas, la planta de Biogás en Los Pocitos, con un impacto anual de 38 millones de kilovatios hora, que aprovecha las emisiones de metano para producir energía limpia. También se destacó el Proyecto Génesis, basado en inteligencia artificial para optimizar el sistema de acueducto mediante telemetría, reposición de tuberías y medición inteligente, beneficiando a más de 30.000 hogares barranquilleros.
El Acueducto Regional del Norte alcanzó un 43,7% de avance en sus obras, mientras que el programa Ilumina Tu Ahorro capacitó a más de 700 usuarios en eficiencia energética. La Oficina de Servicios Públicos, además, avanzó en la instalación de 20 sistemas fotovoltaicos en edificaciones públicas y la entrega de 640 neveras de bajo consumo, fortaleciendo la cultura del ahorro energético.
La gestión del riesgo también tuvo un papel central. Durante 2024, se elaboró un estudio de vulnerabilidad social en 13 barrios de la localidad Suroccidente, y se capacitó a 249 líderes comunitarios en prevención de desastres. Más de 1.500 hogares recibieron apoyo humanitario como parte del programa de atención y recuperación ante emergencias.
Con estos resultados, Barranquilla demuestra que su apuesta por ser una ciudad ambiental y sostenible es hoy una realidad tangible. Los avances en arborización, energía limpia, gestión de residuos y educación ambiental reflejan un compromiso con el futuro de sus habitantes y con el planeta. La sostenibilidad ya no es una meta lejana, sino un camino firme que consolida a Barranquilla como modelo de innovación urbana y desarrollo responsable en Colombia.